OLOCAU DEL REY
LA TODOLELLA
ETAPA 5
DE LA NARANJA A LA MOLA
OLOCAU DEL REY - LA TODOLELLA
Els Ports acoge numerosos lugares que dotan de autenticidad a estas tierras. Las montañas se levantan sobre el paisaje ofreciendo espectaculares vistas. En Olocau del Rey podemos encontrar la Ermita de la Virgen de la Naranja, a 1.164 metros de altitud. La Mola de la Todolella hace de frontera natural con Aragón, a unos 1.100 metros.
PUNTOS DE SELLO:
– Vilafranca. Oficina de turismo y Ayuntamiento.
– Cinctorres. Oficina de turismo y Ayuntamiento.
– Forcall. Oficina de turismo y Ayuntamiento.
– La Mata. Ayuntamiento.
– Todolella. Ayuntamiento.
– Olocau del Rey. Punto de información turística.
– Villores. Ayuntamiento
– Morella. Oficina de turismo.
– Vallibona. Punto de información turística.
– Portell. Ayuntamiento.
– Herbés. Ayuntamiento.
Para más información, ponerse en contacto con cualquier punto de inscripción o con la Mancomunidad Comarcal Els Ports:
Tlf. 964440306 / 964441266
E-mail: info@mancomunitatelsports.es
Ermita de la Magdalena
Patrimonio natural/arquitectónico
La arquitectura religiosa de Olocau del Rey se encuentra representada por la iglesia de Ntra. Sra. del Pópulo (ss. XIII-XIV) y por sus cinco ermitas. De estas últimas, la ermita de la Magdalena es la más antigua. Se corresponde a las ermitas denominadas de Reconquista y su origen se remonta al siglo XIV, aunque fue muy modificada en el siglo XVIII. Se hallaba al borde de una antigua vereda, de la que aún quedan rastros del empedrado y muretes que la delimitaban.
Situada a las afueras de la población, en la carretera a Bordón, se trata de una pequeña construcción rectangular y alargada con cubierta de tejas a dos aguas. La fábrica es de mampostería. Presenta la peculiaridad de su entrada, ya que es lateral y bajo un corto tejadillo. La puerta es de tablones de madera, enmarcada en un arco de medio punto, y es la única abertura en los paramentos salvo una estrecha aspillera bajo el alero. En el interior, preside el altar una imagen de María Magdalena.
Castillo de Olcaf
Patrimonio natural/arquitectónico
Olocau del Rey fue una importante plaza medieval, debido a su localización estratégica. Gracias a ello, contó con importantes edificios, muchos de los cuales han llegado hasta nuestros días. El castillo de Olcaf u Olocau del Rey fue, durante siglos, un preciado y codiciado sistema defensivo, en estas tierras fronterizas. Se encuentra en el Puig de Olocau, a 1.199 metros de altitud, desde donde se obtienen unas espectaculares vistas panorámicas. Fue construido por los musulmanes, en el siglo X, siguiendo la técnica del tapial. Posteriormente, fue reconstruido por El Cid, en 1084. Fue una plaza importante en las batallas durante la Reconquista.
En el año 1271, el infante Don Pedro concedió la Carta Puebla a la localidad, integrándose en el Reino de Valencia. En este castillo estuvo presa la Condesa de Urgel, Margarita de Montferrato, madre de Jaime de Urgel, aspirante al trono de Aragón tras la muerte de Martín el Humano, a principios del siglo XV. Se conservan algunos lienzos de murallas y una torre de planta circular. El conjunto del castillo se encuentra declarado Bien de Interés Cultural.
Mas de Mola
Patrimonio natural/arquitectónico
El mas o masía es la casa tradicional de este territorio. Se trata, generalmente, de una explotación agraria integrada por una casa de campo, con diversas dependencias. En ella se realizaban labores relacionadas con el ganado, la agricultura y la explotación de los bosques. El Mas de la Mola está formado por un conjunto de edificaciones que datan del siglo XVII. En su construcción se aprovechó el desnivel del terreno, por lo que presenta volúmenes a distintas alturas, con cubiertas a dos y una agua.
La fachada y acceso principal se encuentran en el nivel inferior. Está realizada en mampostería, y combina la piedra vista y la revestida con revoco de cal. La composición de sus fachadas es sobria y funcional, y predomina el muro ciego, presentando algunos vanos adintelados, de pequeño tamaño. También cuenta con pequeños balcones sin vuelo, ubicados en la fachada principal buscando el sol.
Peiró de Sant Pere
Patrimonio natural/arquitectónico
La piedra en seco es una constante en Vilafranca. Desde hace siglos hay una arquitectura propia, sencilla, popular y ecológica que ha transformado el paisaje de una manera sabia y respetuosa con el medio ambiente.
La necesidad de aumentar la superficie y la calidad del terreno cultivable conllevó a la extracción de grandes cantidades de piedra. Estas eran dejadas en las proximidades del terreno transformado y, al mismo tiempo, se les daba una utilidad. Con la piedra, los pobladores crearon centenares de kilómetros de paredes de piedra en seco, casas, balsas, pozos, bancales, abrevaderos, etc.
Entre Vilafranca y el peiró (cruz) de Sant Pere resulta cautivadora la visión de esta llanura, conocida como la Devesa, que parece un mar de piedra en seco, debido a los numerosos muros y casas de piedra construidas en el camino. También, destaca en este tramo el Mas de la Blaia.
Peiró de Santa Bàrbara
Patrimonio natural/arquitectónico
Este “peiró”, padrón o cruz devocional es posterior al año 1940, aunque contiene algunas piezas del peiró primitivo. Se compone de un pequeño monolito realizado en mampostería, rematado con una piedra tallada original. Contiene un mosaico que simula una capilla, formado por nueve piezas cerámicas dedicado a Santa Bárbara. El conjunto está rematado con una cruz latina realizada en piedra.
Los padrones, o cruces, se ubicaban a las entradas de las poblaciones, en los cruces de caminos y/o en otros lugares de relevancia.
Llavador i Font de Xorret
Patrimonio natural/arquitectónico
El conjunto hidráulico, se encuentra en la parte más baja de la Todolella, a las afueras del casco urbano. Está formado por el lavadero y la Font del Xorret. El lavadero es una balsa partida, de forma rectangular, y tiene unas medidas de 6 x 12 metros. Se construyó en el barranco para aprovechar parte del caudal del Barranco del Mas de la Mola y de la fuente.
Su origen se remonta al siglo XIX. Las paredes están realizadas en mampostería de piedra recubierta en algunas partes por mortero. El techo presenta una estructura de madera y tejas curvas de cerámica. Es destacable el curioso sistema anclado en el techo de tirantes de madera que se empleaba para tender la ropa, después de su lavado.
Se conserva un viejo escrito en la pared con la siguiente advertencia: “1902 En este labador (sic) se prohíbe lavar ropas sucias ni de color bajo la multa de una peseta.”