VILLORES

PEQUEÑA LOCALIDAD CON MUCHO ENCANTO

Villores es una pequeña localidad situada en la ladera de una montaña, a orillas del río Bergantes, limitando con Forcall y Morella. Su principal actividad está basada en la ganadería y agricultura y algunas de sus construcciones, como Las Eras, nos muestran la importancia que siempre ha tenido el mundo rural. Uno de los atractivos para conocer este municipio es el proyecto ApiVillores. En la parte alta de la localidad, esta empresa cuenta con una explotación apícola en la que ofrece la posibilidad de descubrir el curioso mundo de las abejas mediante visitas guiadas. Su casco urbano se caracteriza por estrechas y pequeñas calles. El elemento más importante de su arquitectura militar es la Torre del Castell, de la que se conservan algunas ruinas junto a la ermita de Nuestra Señora del Buen Suceso. En cuanto a su patrimonio arquitectónico destaca el Ayuntamiento, la Casa Marquesal, y la iglesia parroquial. Los parajes más destacables de Villores son el Molí de la Cova, el monte de Sant Joant y la Font del Bosc.

CASTILLO VILLORES

El Castillo y la Ermita de Nuestra Señora del Buen Suceso: El Castillo es un edificio que parece que fue la torre fortaleza de origen musulmán. A su lado se encuentra la ermita, en pleno camino de subida a las eras.

Las Eras: Conjunto escalonado de eras comunales con los cobertizos correspondientes a cada era. Se conservan en buen estado y todavía resulta fácil imaginar como se trabajaba en tiempos pasados.

Palacio del Marqués de Villores: Edificio situado en la plaza del pueblo y que tiene un porche de entrada. Actualmente es el ayuntamiento de la localidad.

ANTIGUO
MOLINO DE VILLORES

Iglesia parroquial: Del siglo XVIII, está dedicada a los Santos Juanes, Bautista y Evangelista, es una construcción de planta y estilo neobarroco.

Molino de la Cueva: Antiguo molino situado en la ribera del río Bergantes, en un camino que va dirección a Palanques y la Balma y que es un buen lugar para pasear.

Tradición textil: En Villores cerró la fábrica de la plaza, pero aún así, hoy en día es posible a los vecinos y vecinas cosiendo diariamente en sus cases y, durante el verano, en la entrada del pueblo.